Algo se movió en el suelo, al lado mío.
Me pareció que era una pequeña ratita blanca.
Giré rápido y cuando miré vi solo un pedacito de papel blanco, algún recorte que había caido desde mi biblioteca.
Llegué tarde.
La ratita ya se había transformado.
y ahí se quedó. Seguramente esperando a que deje de mirarla, para volver a ser ratita y correr a su escondite detrás de mi placard.
11.3.05
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario